combo letal para el trigo de la principal región agrícola

En la madrugada del 12 de octubre hubo heladas agronómicas generalizadas en la región núcleo. Los registros en el sur y oeste fueron de -1,2°c en Rojas y -1°C en Hernando, respectivamente.

Para entender la gravedad que puede tener este evento, según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario, hay que tener en cuenta que el trigo está en pleno periodo crítico, entre hoja bandera y llenado de granos, y es muy sensible a estos eventos. Más aún cuando el cultivo está soportando un intenso estrés hídrico y llega con una mala condición a esta etapa en la región. Lamentablemente, el agua del día anterior fue escasa y para los alrededores de Rosario. A esto hay que sumarle que los lotes de zonas topográficas bajas van a ser más afectados.

«En términos de rinde, un lote afectado en forma grave, si apuntaba a 20 qq/ha, después de esto puede pasar a cosecharse solo 7 qq/ha», señaló la Bolsa rosarina.

Pero para evaluarse el impacto habrá que esperar hasta la próxima semana. Los ingenieros esperan que en mayor o menor grado haya un daño significativo en los lotes.

Pero no solo la región fue afectada, gran parte de la región pampeana sufrió este evento excepto el norte de Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba. En Buenos Aires, toda la provincia quedo con registros inferiores a 1 grado. En Tandil se midieron -2,5°C y en Dolores -2,9°C.

Según explicó la Bolsa de Comercio de Rosario, se le dice helada agronómica a temperaturas menores a 3 ºC medidas en el abrigo de una estación meteorológica, lo cual en la intemperie y a nivel del suelo podrían ser de 0 ºC o menos. Solo en el norte de los departamentos de Marcos Juárez y Unión, en Córdoba, y áreas del departamento San Martín estuvieron por encima de los 4°C.

La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) recortó la estimación nacional de producción del cereal en casi un 5 por ciento con respecto a un mes atrás, cayendo de 15 a 14,3 millones de toneladas. Y advirtió que el escenario es «muy complejo» para el cultivo, que se encuentra en su etapa crítica para la definición del rendimiento, y la situación «aún podría empeorar».

«Salvo las lluvias de fines de mayo sobre el este de la región pampeana, las de la primera semana de septiembre en el centro de la zona núcleo, las que han acompañado al sudeste bonaerense y hasta hace un mes atrás a Entre Ríos, la campaña triguera 2023/24 no recibió lluvias importantes en lo que va del ciclo», repasaron los técnicos de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la BCR.

El cultivo sigue deteriorándose y el aporte importante de agua a gran escala «es urgente para poder completar los granos y detener la caída de rinde que se viene corroborando a cada semana», indicó la entidad.

«La sequía que castiga duramente desde hace más de un año no da tregua y «le ha quitado al trigo las posibilidades de alcanzar siquiera los 15,6 millones de toneladas que se proyectaban como escenario de normalidad al comienzo de la campaña», lamentaron desde la Bolsa rosarina.