las familias de las víctimas se movilizan en París

Romain, Ludovic, Alban, Mohamed, Franck… Y entre cada nombre, de 100 a 200 personas coreando al unísono «muerto en el trabajo». Frente a la plaza de Ajaccio (Paris 7^mi), familiares afligidos, algunos muy emocionados, blanden rostros, casi exclusivamente de hombres, a menudo jóvenes. La mayoría de ellos trabajando en la construcción o la agricultura, todos tienen en común que han perdido la vida en su lugar de trabajo en los últimos meses o años.

Sábado 4 de marzo, el joven Colectivo familiar: detener la muerte en el trabajo destacar la tragedia de los accidentes de trabajo mortales, que aún afectaron a 645 empleados del sector privado en 2021 (para funcionarios, autónomos y otras situaciones, los datos están incompletos).

Creado hace unos meses a instancias de Caroline Dilly, madre de Benjamin, un techador de 23 años, que murió tras una caída el 28 de febrero de 2022 en Chinon, y Fabienne Bérard, madre de Flavien, que perdió la vida. el 5 de marzo de 2022, a la edad de 27 años, en un lugar de extracción de petróleo en Charente, este colectivo permite a las familias apoyarse mutuamente en el calvario y ayudarse mutuamente en las largas demandas administrativas y legales que les esperan.

“D notificar negligencia”

“Nos sentimos tan solos. No sabíamos nada, nos dimos cuenta de que es un fenómeno masivo. Desde entonces, nos apoyamos unos a otros yendo a las pruebas de los demás.preciso M^{A mí} Berardo. Re [la manifestation d’] hoy nos dijimos que había que poner cara y denunciar la negligencia en el trato a nuestros jóvenes. »

Luego de minutos de silencio y aplausos, el colectivo expresó una serie de quejas, antes de ser recibido en el Ministerio del Trabajo ubicado justo enfrente: primero, más transparencia en las cifras de muerte en el trabajo, y mejor apoyo a las familias de las víctimas.

La mayoría de las veces, los familiares dicen que esperaron meses antes de obtener alguna explicación de las circunstancias del accidente, debido a la lentitud de las investigaciones y juicios. A casi tres años de la muerte de su hijo Jérémy Wasson, estudiante de ingeniería de 21 años, que se cayó de un techo el tercer día de su «curso de observación», sus padres, que no forman parte del colectivo pero pudieron incorporarse , todavía no lo sé «lo que estaba haciendo en ese techo». “La empresa fue acusada de homicidio involuntario hace un año, pero apelará”dice Valérie, su madre:

“Estamos horrorizados por la impunidad de este patrón y la lentitud de la justicia. Iremos hasta el final pero tenemos diez años. Y durante este tiempo, la empresa sigue recibiendo decenas de pasantes de la escuela de Jérémy, ¿es esto normal? »

Te queda por leer el 38,74% de este artículo. Lo siguiente es solo para suscriptores.