Mikaela Shiffrin, el meteorito de esquí mundial que bate récords

Pero, ¿hasta dónde extenderá Mikaela Shiffrin su reinado? Coronada campeona del mundo de eslalon gigante el jueves 16 de febrero, una semana después de conseguir la plata en el supergigante, la reina estadounidense del esquí alpino tuvo la oportunidad de sumar una línea más a su palmarés el sábado 18 de febrero, durante la prueba de eslalon de estos Mundos, en la pista del Roc de Fer, en Méribel (Saboya).

Una trayectoria ya muy nutrida, que la convierte, a sus 27 años, en una de las mejores esquiadoras de todos los tiempos. La oriunda de Vail, Colorado, tiene la mayor cantidad de victorias en Copas Mundiales Femeninas: 85 triunfos, tres más que su compatriota Lindsey Vonn, la última en las pistas de Spindleruv Mlyn, en República Checa, a fines de enero.

A ello hay que sumar tres medallas olímpicas (dos de oro) en Sochi (Rusia) en 2014 y en Pyeongchang (Corea del Sur) en 2018, trece medallas mundiales, incluidos siete títulos, en cuatro disciplinas diferentes (slalom, slalom gigante, super-G y combinadas), como la sueca Anja Paerson y la francesa Marielle Goitschel antes que ella. Es cierto que se mantuvo a una buena distancia de la alemana Christel Cranz (15 títulos, incluidos 12 títulos), pero eso fue antes de la guerra, en la Antigüedad del esquí.

Desde el Mundial de Schladming (Austria) en 2013, la estadounidense siempre se ha adornado con oro. “Shiffrin está realmente en la cima, dice Florence Masnada, ex doble medallista olímpica en combinada ahora consultora de Eurosport. Es técnicamente muy precisa, su esquí no es arriesgado, tenemos la impresión de que siempre tiene margen.. Mikaela Shiffrin es esquí moderno. » Para Florencia Masnada, “No hay foto, Shiffrin, es la mejor esquiadora de todos los tiempos”.

La interesada lo niega y asegura no pretender grabar su nombre en la historia del esquí mundial. Ella solo confiesa que ha estado » un poco nervioso » con salida desde el gigante de Kranjska Gora (Eslovenia), el 8 de enero de «debido al registro» propiedad de Lindsey Vonn, estaba amamantando menos de un minuto después.

Después de su victoria el jueves en el mundial gigante, la estadounidense hizo este pequeño recordatorio: “No creo que pueda hacer nada para ser el mejor esquiador de todos los tiempos. (…) Algunas personas me considerarán el mejor, otros pensarán que ni siquiera soy parte de este debate. Ambos pueden tener razón. »

“Me da vértigo”

A partir de ahora, la pregunta ya no es si se batirá el mítico récord del sueco Ingemar Stenmark (86 mundiales), que parecía fijado para la eternidad, sino cuándo. Seguramente antes de final de temporada, en marzo, durante las finales de Soldeu (Andorra). Muchos incluso ven cruzar la barra de las 100 victorias en su carrera, una marca que se pensaba que era inalcanzable. Ella nunca se hizo la pregunta.

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