Por qué Cristina Kirchner eligió a Juan Manzur para acompañar a Wado de Pedro en la fórmula presidencial de Unión por la Patria
«Es el hombre que siempre sonríe. Pueden llover sapos, piedras o culebras, en medio de un terremoto que él sonríe», lo elogió la entonces presidenta Cristina Kirchner Conoció al ministro de Salud. En ese acto, las cámaras de televisión enfocaron así a Juan Luis Manzourun médico sanitario tucumano que cobró así visibilidad nacional, en pleno 2009 cuando la influenza A afecta al país.
Juan Manzur llegó al Gabinete de Cristina -en el que estuvo de 2009 a 2015- en virtud de la fluida relación de la jefa de Estado con la familia Alperovich: Cristina cultivó una relación personal y política afiatada con José Alperovich, entonces mandamás peronista tucumano, ahí vas su esposa Beatriz Rojkés, una fonoaudióloga que llegó a ser diputada y senadora nacionalgracias al poder de su esposo.
Manzur dejó el Ministerio de Salud nacional en 2015 para competir -y ganar- las elecciones a gobernador de Tucumán y tomar así el poder total del peronismo tucumano. Alperovich cayó luego en desgracia cuando, siendo senador nacional, conoció la denuncia de una sobrina suya quien lo acusó en la Justicia por abuso sexual. El senador peronista terminó apartado del Senado Nacional tras el procesamiento por por por «abuso sexual agravado».
A partir de entonces, Manzur se consolidó como un armador del peronismo y militó fuertemente por una liga de gobernadores del Norte argentino, donde conformó una relación muy fuerte con su vecino Gerardo Zamora, el radical aliado del kirchnerismo, qu’manda en Santiago del Estero . Manzur y Zamora fueron voceros de los deseos K en cuanto encuentro de gobernadores sucedió en los últimos años.
Y con el regreso del peronismo al poder en 2019, Manzur consolidó un fuerte vínculo con el joven y flamante ministro del Interior, Eduardo «Wado» de Pedroquien fue designado allí por pedido de CFK.
Manzur mantuvo esa relación tras abandonar la Jefatura de Gabinete (con un paso delucido donde no adelantaron la proyección que imaginaba con su plan «Juan XXIII) siguieron en sintonía con el ministro del Interior cuando intentó avanzar en Tucumán, donde el impedido fue por la Corte Suprema de Justiciala que consideró «inconstitucional» el intento de ser elegido vicegobernador.
Pero el calculador Manzur apostó fuerte por el poder político del PJ en su provincia y mostró el tan mentado «músculo político» al alzarse con la victoria (con su delfín Osvaldo Jaldo como postulante a gobernador) con 540 mil votos para el peronismo y lograr un 84% de presentismo en el distrito.
Luego de eso, el médico sanitarista regresó a Buenos Aires y se reunió con Wado de Pedro y Cristina Kirchner, quienes llegaron a masticar la idea de la fórmula entre el joven mercedino y el oriundo de San Miguel de Tucumán.
Cristina había dicho, a principios de este mes de junio, que esperaba «que los hijos de la generación diezmada tomen la posta». Así, puso la mirada sobre Wado de Pedro, hijo de Enrique y Lucia, desaparecido en 1976 y 1977 por parte de las fuerzas armadas, que iniciaron su militancia política en la agrupación HIJOS y que luego se enroló en La Cámpora, agregó llegó a alcanzar el Jefatura junto a Máximo Kirchner.
Fundamental Fue para la elección de Wado como candidato presidencial la venia de Máximo Kirchner. Primó así, en madre y el hijo Kirchner la idea de «ir con lo propio», de enfrentar lo que será la «resistencia al ajuste» del próximo gobierno con un candidato que no se déperfile.
Por lo tanto, CFK empoderó a De Pedro par de meses atrás y le dijo que «caminara», figura utilizada en el peronismo para mostrarse en la calle y con la dirección y militancia. Por ejemplo, Máximo se alió con Martín Insaurralde (mandamás de Lomas de Zamora y jefe de Gabinete bonaerense, enemistado con Axel Kicillof) para que Wado se recibió adecuadamente por los intendentes del Conurbano.
Cristina también llevó: recibido en los últimos meses a intendentes tradicionales como Alberto Descalzo, Juan José Mussi; a ex alcaldes pero con peso distrital como Julio Pereyra y Alejandro Granados ya díscolos como Julio Zamora y Fernando Gray, el primero enemistado con Sergio Massa y el segundo, con su hijo Máximo,
Cristina y Máximo priorizaron así el perfil «puro K» que no necesita explicar como sí lo podría hacer si eligieran a Massa. El hoy ministro de Economía debe lidiar por estos días con el Fondo Monetario Internacional para cumplir con las obligaciones de la pago de deuda e demandó obtener dólares para que la economía no se madre, de acá al fin del mandato del Frente de Todos.
Wado de Pedro será el candidato de la reconocida Unión por la Patria acompañado de un peronista tradicional como Juan Manzur, que trajo el apoyo (concreto) de los gobernadores y que tiene ligazón con intendes, como el matancero Fernando Espinoza, a quien el tucumano ve en cada visitado en Buenos Aires.
En la última semana, Manzur había hecho una campaña publicitaria (en carteles callejeros y pancartas en portales) con la leyenda «Manzur Presidente». En menos de mes, el preocupado médico tucumano pasó de fallido postulante a vicegobernador tucumano a candidato de CFK a vicepresidente nacional.
Ahora, Juan Luis Manzur deberá cumplir con su parte: que es aportar oficio y votos al peronismo (rebautizado «Unión por la Patria») al balotaje contra Juntos por el Cambio, el verdadero enemigo político en esta elección presidencial.
